Esta abundante cazuela de pasta y carne es un plato reconfortante y delicioso, perfecto para una comida familiar. Esta cazuela, que combina una rica mezcla de carne molida de cerdo y res, una salsa blanca cremosa y una sabrosa cobertura de tomate, es a la vez satisfactoria y nutritiva. ¡Comencemos!

Ingredientes:

• 1 cebolla finamente picada
• 2 dientes de ajo rallados
• 18 onzas (500 gramos) de mezcla de carne molida de cerdo y res
• Sal al gusto
• Pimienta negra al gusto
• Orégano al gusto
• Aceite de oliva
• 8 onzas (250 gramos) de pasta
• 1 onza (30 gramos) de mantequilla
• 4 cucharadas de harina
• 16 onzas líquidas (500 mililitros) de leche
• 1 tomate finamente picado
• 7 onzas líquidas (200 mililitros) de salsa de tomate
• 7 onzas (150 gramos) de queso rallado

Direcciones:

1. Preparar la cebolla y el ajo:
   • Picar finamente la cebolla y rallar el ajo.
   • Calienta un poco de aceite de oliva en una sartén a fuego medio.
   • Añade la cebolla picada y saltea hasta que esté blanda y traslúcida.
   • Añade el ajo rallado y sofríe durante un minuto más.
2. Cocinar la carne:
   • Añade la mezcla de carne molida de cerdo y carne de res a la sartén.
   • Condimentar con sal, pimienta negra y orégano.
   • Cocine a fuego lento durante unos 10 minutos hasta que la carne esté completamente cocida y los sabores se combinen.
3. Cocine la pasta:
   • Llena una olla con agua y añade una pizca de sal y un chorrito de aceite de oliva.
   • Pon el agua a hervir y luego añade la pasta.
   • Cocine según las instrucciones del paquete hasta que esté al dente.
   • Escurre la pasta y colócala en un bol grande.
4. Prepare la salsa blanca:
   • En otra sartén, derrita la mantequilla a fuego medio.
   • Añade 2 cucharadas de harina y mezcla bien para formar un roux.
   • Añade la leche poco a poco, removiendo constantemente para evitar grumos.
   • Continúe revolviendo hasta que la salsa comience a hervir y espese.
5. Combine la pasta y la salsa blanca:
   • Vierta la salsa blanca sobre la pasta cocida y revuelva para combinar.
6. Montar la cazuela:
   • Precalentar el horno a 180°C (360°F).
   • Lubricar tres fuentes para horno con aceite de oliva.
   • Extiende una capa de la pasta con salsa en cada plato.
   • Añade una capa de la mezcla de carne molida encima de la pasta.
   • En una sartén aparte, calentamos un poco de aceite de oliva y sofreímos el tomate picado hasta que se ablande.
   • Añade la salsa de tomate a la sartén y mezcla 2 cucharadas de harina para espesar la salsa.
   • Extiende esta mezcla de tomate sobre la capa de carne en los recipientes para hornear.
   • Añade otra capa de pasta encima.
7. Cubierta con queso:
   • Rallar el queso y espolvorearlo generosamente sobre la parte superior de los guisos.
8. Hornear:
   • Coloque las cazuelas en el horno precalentado.
   • Hornee durante unos 30 minutos hasta que el queso esté dorado y burbujeante.

Sugerencias para servir:

• Sirva con una ensalada o pan con ajo para una comida completa.
• Acompáñelo con una copa de su vino favorito.

Consejos de cocina:

• Asegúrese de cocinar la pasta al dente, ya que continuará cocinándose en el horno.
• Puedes agregar otras verduras como pimientos morrones o champiñones para darle más sabor.

Beneficios nutricionales:

• Rico en proteínas procedentes de la carne y el queso.
• Contiene vitaminas y minerales de las verduras.
• Proporciona una comida equilibrada con carbohidratos, proteínas y grasas.

Información dietética:

• Contiene gluten y lácteos.
• No apto para vegetarianos.

Almacenamiento:

• Guarde las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 días.
• Recalentar en el horno o microondas antes de servir.

Por qué te encantará esta receta:

• Es un plato reconfortante y abundante, perfecto para las cenas familiares.
• La combinación de pasta, carne y queso siempre gusta a todo el mundo.
• Fácil de hacer y se puede preparar con antelación.

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Conclusión:

Esta abundante cazuela de pasta y carne es una comida deliciosa y nutritiva que le encantará a su familia. Las capas de pasta con salsa, carne sabrosa y cobertura de queso crean un equilibrio perfecto de sabores y texturas. ¡Disfrute preparando y comiendo este clásico plato reconfortante!