Si notás que tu pelo está más fino, se cae con facilidad o ya no crece como antes, este shampoo casero puede ser la solución que necesitás.
Hecho con ingredientes naturales como sábila y romero, no solo limpia el cuero cabelludo, sino que lo nutre desde la raíz, estimula el crecimiento y ayuda a que el cabello crezca más fuerte, grueso y saludable.

Qué necesitás
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½ taza de gel de sábila (aloe vera) natural, extraído directo de la hoja
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1 taza de infusión de romero bien concentrada (con romero fresco o seco)
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2 cucharadas de jabón líquido neutro o base de shampoo sin sulfatos
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1 cucharadita de aceite de ricino o de coco (opcional, para reforzar)
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5 gotas de aceite esencial de romero (opcional, para aroma y efecto extra)
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1 frasco o botella con dispensador
Paso a paso
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Prepará una infusión de romero: colocá una taza de agua con una ramita de romero en una ollita. Llevá a hervor y cociná durante 10 minutos. Apagá el fuego, dejá enfriar y colá.
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En una licuadora, colocá el gel de sábila junto con la infusión ya fría. Licuá hasta que la mezcla quede bien integrada y sin grumos.
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Agregá el jabón neutro o la base de shampoo y mezclá suavemente con cuchara o espátula. Si querés un extra de nutrición, sumá el aceite de ricino o de coco.
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Incorporá las gotas de aceite esencial de romero si deseás potenciar el efecto estimulante y dejar un perfume herbal.
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Verté todo en una botella con pico dispensador. Guardalo en la heladera y usalo dentro de los 10 días.
Cómo se usa
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Mojá bien el cuero cabelludo y aplicá el shampoo casero en las raíces.
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Masajeá con movimientos circulares durante al menos 2 minutos para activar la circulación.
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Repartí el producto por todo el largo del pelo y dejá actuar unos 3 minutos más.
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Enjuagá con abundante agua tibia. No uses agua muy caliente para evitar resecar.
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Repetí el lavado 3 o 4 veces por semana para lograr mejores resultados.
Tips y consejos:
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Si podés, usá aloe vera directo de la planta, ya que es más puro y efectivo.
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Para mantener el producto en buen estado, guardalo siempre en la heladera y no lo uses si notás cambio de olor o color.
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El romero ayuda a estimular el crecimiento y también oscurece ligeramente el cabello con el uso frecuente, ideal para quienes tienen canas prematuras.
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El aceite de ricino engrosa la fibra capilar y es ideal si tenés el pelo muy fino o debilitado.
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Este shampoo no hace mucha espuma, pero eso no significa que no limpie. Al no tener sulfatos, es más suave y amigable con tu cuero cabelludo.
Un tratamiento económico, natural y muy efectivo para devolverle fuerza y vida a tu cabello.
Con constancia, vas a notar la diferencia en pocas semanas.
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