Si alguna vez has sentido el aroma dulce y especiado de la cocina de tu abuela, sabrás que es un recuerdo imborrable. Esta receta de tarta de miel y canela, medida en tazas y cucharas como lo hacía la abuela, es una verdadera joya.

Con la dulzura natural de la miel, el toque cálido de la canela y un toque de vino de Oporto, cada bocado te transportará a esos momentos entrañables. Lo mejor de todo es que es fácil de hacer y está riquísima. ¡Prepárala y disfruta de una deliciosa tradición familiar!

Cómo preparar Tarta de miel y canela

Para preparar esta tarta deliciosa, vas a necesitar:

Ingredientes:

• 3 huevos
• 1 taza de azúcar
• 2 tazas de leche
• 2 tazas de harina
• 2 cucharaditas de café de bicarbonato de sodio
• 2 cucharaditas de canela en polvo
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• 4 cucharadas de miel
• 3 cucharadas de vino de Oporto
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Preparación:

1. Precalienta el horno: Comienza precalentando el horno a 180°C (350°F). Engrasa y enharina un molde redondo para evitar que la tarta se pegue.
2. Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, tamiza la harina junto con el bicarbonato de sodio y la canela. Esto ayudará a que la mezcla sea más homogénea y a evitar grumos.
3. Prepara la mezcla húmeda: En otro bol, bate los huevos junto con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa y ligeramente espumosa. Añade la leche, el aceite de oliva, la miel y el vino de Oporto, mezclando bien para que todos los ingredientes se integren.
4. Combina las mezclas: Poco a poco, incorpora la mezcla de ingredientes secos a los ingredientes húmedos, batiendo suavemente hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.
5. Vierte en el molde: Vierte la masa en el molde previamente preparado, asegurándote de que esté nivelada para que se cocine de manera uniforme.
6. Hornea la tarta: Lleva el molde al horno precalentado y hornea durante aproximadamente 45-50 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
7. Enfría y sirve: Una vez que la tarta esté lista, retírala del horno y déjala enfriar en el molde durante unos 10 minutos antes de desmoldarla. Luego, colócala sobre una rejilla para que se enfríe por completo.
8.  

¡Y ahí lo tienes! Una deliciosa tarta de miel y canela que te recordará a los mejores momentos en la cocina de la abuela.

Consejos

1. Usa miel de calidad: El sabor de la miel es clave en esta receta. Utiliza una miel de buena calidad, preferiblemente una miel pura y aromática, como la miel de azahar o de romero, para realzar el sabor de la tarta.
2. Incorpora los ingredientes secos lentamente: Al mezclar los ingredientes secos con los húmedos, hazlo en partes y con movimientos suaves. Esto evitará que se formen grumos y asegurará que la masa quede uniforme y esponjosa.
3. Controla la temperatura del horno: Cada horno es diferente, por lo que es recomendable revisar la tarta unos minutos antes del tiempo estimado de horneado. Si notas que la superficie se dora demasiado rápido, cubre la tarta con papel de aluminio para evitar que se queme y permita que se cocine de manera uniforme por dentro.
4. Añade un toque de frutos secos: Si te gusta el contraste de texturas, puedes añadir a la masa un puñado de nueces picadas o almendras laminadas. Esto no solo le dará un toque crujiente, sino que también complementará muy bien el sabor de la miel y la canela.
5.