La mejor tarta de queso: New York cheesecake a mi manera

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No es ningún secreto que en casa no vuelven locos las tartas de queso, en especial la New York cheesecake o tarta de queso horneada. Es por ello que os traigo la que es, a mi parecer, la mejor tarta de queso que he probado nunca. Y no solo por su sabor suave y cremoso, también por su sencillez a la hora de elaborarla. Esta deliciosa tarta no lleva creme freiche ni crema de leche así que no nos volveremos locos en el supermercado buscando creme freiche; no se hornea al baño María por lo que no tendremos que envolver el molde desmoldable como si nos fuese la vida en ello, y es muy sencilla de hornear así que no tendremos que estar pendientes del horno ni cambiar un sin fin de veces la temperatura del horno. ¿Que más se puede pedir? Bueno pedir por pedir yo me pediría un trozo de esta riquísima tarta. ¿Y vosotros? 

Y para que esta tarta os salga perfecta aquí tenéis el vídeo paso a paso para que os salga a la perfección y comprobéis lo suave y cremosa que está:

 



Ingredientes:
*Para la base:
Galletas de avena
Mantequilla derretida
1 chorrito de leche(Opcional)

*Para la cheesecake:
800gr. de queso crema
1 cucharada de zumo de limón
2 cucharadas de esencia de vainilla
2 yogures
240gr de azúcar
4 cucharaditas de maicena
5 huevos

*Para la decoración:
Mermelada de fresa
Fresa o frutilla

Preparación:
Nuestro primer paso antes de ponernos con la receta es poner una bandeja con agua en el nivel inferior del horno y poner la rejilla donde hornearemos la cheescake en un nivel superior a la bandeja con agua.(Esta bandeja no es para hacer un baño maría sino para crear vapor y humedad.)Hecho esto precalentar el horno a 160ºC . Lo siguiente es hacer la base de galleta. Para ello picar la galleta y mezclare la galleta con un chorrito de leche y un par de cucharadas de mantequilla derretida hasta que se vuelva una miga grumosa y manejable. Verter en un molde de 24cm de diámetro con la base forrada con papel de horno y extender y apretar la miga con una cuchara o vaso hasta que se nos forme una base de galleta compacta. Cubrir bien por los bordes para que no se escape la masa de cheesecake por alguna grieta. Hornear de 5 a 10 minutos la base de galleta para que se seque.

Después a hacer la masa de cheesecake,para ello necesitamos un robot con la pala mezcladora o con un tourmix o licuadora. No hay diferencia, lo importante es batir a velocidad muy baja para no incorporar aire, y el el caso de tourmix o licuadora hay que hacerlo a mínima velocidad y a pulsos. En un bol o robot agregamos el queso crema,el azúcar,la vainilla,el limón y los yogures y lo batimos a velocidad muy baja hasta que se forme una crema. Después agregar los huevos ligeramente batidos y mezclar poco a poco hasta que se integre todo. Por último agregar la maicena y una vez esté todo integrado ya tenemos la mezcla de nuestra cheescake. Ahora vamos a verterla sobre nuestra  base de galleta con un cucharon del revés para que no caiga con tanta fuerza sobre la galleta,damos unos pequeños golpecitos para sacar las burbujas de aire y lo metemos en el horno a 150 ºC. Como es una masa bastante líquida para que se ponga más densa en menos tiempo yo lo pongo 10 minutos con ventilador(aire) o turbo y después se lo quito,pero si no tenéis no pasa nada,no es necesario. Después de estos 10 minutos con aire lo horneamos 40 minutos más sin aire o ventilador. Es decir,un total de 50 minutos. Después de esos 50 minutos lo dejamos reposar dentro del horno con el fuego apagado 30 minutos más,así terminará de cocinarse. Pasados esos 30 minutos pasaremos el filo de un cuchillo humedecido por los bordes y lo dejaremos templar cubierto con un trapo y lo dejaremos enfriar en la nevera,mejor de un día parea otro. Una vez bien fría cubrir de mermelada y decorar al gusto. En mi caso con fresas ya que estamos de temporada. Y ahora a disfrutar de un trocito de tarta que nos los tenemos bien merecido

Espero que te haya gustado la receta y te animes a probarla. 

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