Mi abuela tiene un talento especial para hacer de cada tarde un momento cálido y acogedor. Uno de sus secretos mejor guardados es este pastel sencillo pero delicioso, que siempre acompaña a una buena taza de café. Con pocos ingredientes y sin complicaciones, esta receta se ha convertido en un clásico en nuestra familia.
La textura esponjosa y el suave aroma a vainilla y azúcar invaden la casa, anunciando que es hora de sentarse juntos, compartir una charla y disfrutar de algo hecho con amor. ¡Aquí te comparto la receta fácil de este pastel que hace mi abuela casi todos los días al final de la tarde!
Cómo preparar Pastel delicioso
Este pastel es perfecto para acompañar el café de la tarde. Su textura esponjosa y su sabor suave lo hacen irresistible, vas a necesitar:
Ingredientes:
- 1 ½ taza (té) de harina de trigo
- 1 ½ taza (té) de azúcar
- ½ taza (té) de aceite
- ½ taza (té) de agua
- 3 huevos
- 1 cucharada rasa de polvo para hornear
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 1 pizca de sal
Modo de preparación:
- Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde para pastel con un poco de aceite o mantequilla. Si lo prefieres, puedes espolvorear un poco de harina para evitar que el pastel se pegue.
- Mezcla los ingredientes secos: En un tazón grande, tamiza la harina de trigo junto con el polvo para hornear y la pizca de sal. Tamizar ayudará a que el pastel quede más esponjoso. Reserva.
- Bate los huevos: En otro tazón, bate los 3 huevos junto con el azúcar hasta que la mezcla se vuelva clara y espumosa. Esto le dará aire a la masa, haciendo que el pastel sea aún más ligero.
- Agrega los ingredientes líquidos: A la mezcla de huevos y azúcar, añade el aceite y la esencia de vainilla. Bate bien hasta que los ingredientes estén integrados. Luego, incorpora el agua poco a poco.
- Une las mezclas: Vierte la mezcla de ingredientes secos en el tazón de los líquidos, poco a poco, batiendo suavemente con una espátula o un batidor de mano, hasta que no queden grumos. No batas demasiado para que la masa no pierda su aire.
- Hornea el pastel: Vierte la masa en el molde engrasado y lleva al horno precalentado. Hornea durante aproximadamente 30-40 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, salga limpio.
- Deja enfriar: Una vez listo, retira el pastel del horno y déjalo reposar en el molde durante unos 10 minutos antes de desmoldarlo. Luego, colócalo en una rejilla para que termine de enfriar completamente.
Si te sientes creativo, puedes agregarle un toque personal: un poco de ralladura de limón, chocolate derretido por encima, o una cobertura de azúcar glas. ¡Pero te aseguro que solo, tal como lo hace mi abuela, es simplemente perfecto!
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