Este postre nace a raíz de que en el «Mundo Entero» hay muchísimas personas que no pueden consumir azúcar ni muchos de sus derivados dulces; a estas personas en ocasiones se las escucha decir que tienen una cantidad de postres muy acotada sin posibilidad de probar algo distinto ó nuevo.
La abuela, con sus años de experiencia, logró una receta sana, sencilla de realizar, muy sabrosa y refrescante a la boca denostando sensaciones muy positivas al consumidor.
El reemplazo del azúcar por edulcorantes de primera calidad, dio como resultado un alto número de personas controladas en su enfermedad como por ejemplo la diabetes. Solo con saber que 10 grs de azúcar equivalen a 1 gr de edulcorante es suficiente.
Ingredientes:
- 1k de Higos
- 700cc de Agua
- 50g de Edulcorante a gusto
- 1 hoja de Laurel opcional.
Procedimiento
Si bien los ingredientes son muy pocos; debemos hacer hincapié en conseguir higos que se encuentren en un estado justo de firmeza, que no tiendan a desarmarse al tocarlos. Es distinto si fueran para mermelada que el higo puede estar algo pasado.
En un recipiente apropiada para hornalla, colocamos los 700 cm3 de agua no pasar más de 1 litro y lo llevamos a fuego fuerte.
Al momento de hervir, retiramos del fuego y agregamos el edulcorante de primera calidad. Se aconseja Estevia, en su defecto, Sacarina y en tercer lugar Ciclamato. Cualquiera de estos no pierde su sabor resistiendo altas temperaturas.
Se revuelve bien, se incorporan los higos y nuevamente al fuego; en esta oportunidad a fuego moderado durante 5 minutos.
Retiramos y se agrega la hojita de laurel para que rompa el sabor amargo de la cáscara del higo.
Se deja enfriar y se los coloca en los recipientes que ustedes deseen para conservarlos; previamente retiramos la hoja de laurel.
Un reposo en los frascos de 24 hrs es suficiente para que los higos estén a punto para deleitar cualquier paladar.
Si deseamos algo más de almíbar, se puede preparar un poco más de agua con el edulcorante y agregarlo; lo más importante es el reposo para que el higo quede bien impregnado.
Agradecemos a la abuela por habernos acercado esta maravillosa receta que ella disfrutaba cuando era pequeña en la península ibérica.
P.D. Está prohibido deleitarse con solo dos higos!
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